Palabras latinas
El latín siempre ha tenido una gran influencia en el léxico inglés, desde la época germánica -incluso durante la era continental, antes de que los germánicos llegaran a las Islas Británicas- hasta nuestros días. También ha sido la primera y más constante de las muchas lenguas de las que ha tomado prestado el inglés, durante su desarrollo gradual hacia lo que hoy conocemos como “inglés”. Más de 300 palabras han “sobrevivido” incluso en el inglés moderno en su forma latina original, palabras como actor, labor, elevator y vertigo.
El acento de este artículo, que explorará los respectivos préstamos que el inglés hizo en sus diversos periodos históricos, se pondrá en el inglés antiguo, ya que lo más interesante es que puede dividirse en tres periodos de préstamos del latín, el tercero de los cuales, según Albert C. Baugh y Thomas Cable, “marca el verdadero comienzo del hábito inglés de incorporar libremente elementos extranjeros a su vocabulario”[1].
En general, hay que señalar que durante todo el periodo del inglés antiguo, el latín gozó de una gran consideración. Según Baugh y Cable “era la lengua de una civilización muy apreciada, de la que los anglosajones querían aprender”[2] La razón de esa buena reputación temprana era el hecho de que los romanos eran el pueblo conquistador, no el conquistado, de la civilización conocida.
Préstamos del inglés antiguo
Una palabra prestada es una palabra asimilada, al menos en parte, de una lengua (la lengua donante) a otra[1][2], a diferencia de los cognados, que son palabras de dos o más lenguas que se parecen porque comparten un origen etimológico, y los calcos, que implican traducción. Los préstamos de lenguas con escrituras diferentes suelen transliterarse (entre escrituras), pero no se traducen. Además, los préstamos pueden adaptarse a la fonología, fonotáctica, ortografía y morfología de la lengua de destino. Cuando una palabra prestada está totalmente adaptada a las normas de la lengua de destino, sólo se distingue de las palabras nativas de la lengua de destino por su origen. Sin embargo, a menudo la adaptación es incompleta, por lo que las palabras prestadas pueden conservar rasgos específicos que las distinguen de las palabras nativas de la lengua meta: fonemas y combinaciones de sonidos prestados, conservación parcial o total de la ortografía original, formas plurales o mayúsculas extranjeras o indeclinabilidad.
Préstamos latinos en inglés
Situado entre Estados Unidos al norte y Centroamérica al sur, México ocupa una importante posición geoestratégica. Con una población de unos 130 millones de habitantes, es el país más grande cuya lengua oficial es el español. Esta nación emergente ocupa el puesto 15 entre las mayores economías del mundo y ha pasado a desempeñar un papel intermedio entre los países industrializados y los países en desarrollo. Esto la convierte en un socio global para Alemania en el contexto de la cooperación al desarrollo. A pesar de su progreso económico, el país se enfrenta a numerosos retos. La desigualdad social es elevada: el 44% de la población vive en la pobreza. Los altos índices de delincuencia, la contaminación ambiental y la falta de transparencia repercuten en la vida cotidiana, especialmente en las ciudades. Por ello, en nombre del Gobierno Federal alemán, el Banco de Desarrollo KfW ayuda a México a combatir el cambio climático, proteger los bienes públicos mundiales, preservar la biodiversidad y avanzar en el desarrollo urbano sostenible.
Loanwords deutsch
El italiano procede del latín vulgar. Tomar prestadas palabras de otro idioma es una vía importante para el desarrollo de una lengua. Desde su aparición, el italiano ha ido recogiendo neologismos de otras lenguas. Los préstamos de palabras latinas en la lengua italiana pueden analizarse desde tres aspectos distintos -el momento en que se toman prestadas, los ámbitos en que intervienen y la parte de la oración a la que pertenecen- para profundizar en la relación entre ambas lenguas y la influencia que el latín impuso al italiano.
Dardano, M., & Trifone, P. (2001). La nueva gramática de la lengua italiana. Milán: Zanichelli.Lotti, G. (2000). La historia aventurera de la lengua italiana. Milán: Bompiani.Marazzini, C. (2004). Breve historia de la lengua italiana. Bolonia: Il Mulino.Marazzini, C. (2001). La lengua italiana. Bolonia: Zanichelli.Qi, Y. C. (2007). Introducción a la lingüística. Shanghai: Shanghai Foreign Language Education Press.Sabatini, F., & Coletti, V. (2005). Sabatini Coletti- Diccionario de la lengua italiana en 2006. Florencia: Giunti.